Aferrándose a la posibilidad de que Kôta pueda seguir vivo, su mejor amigo, Haruomi Mishiba, acompañado de su amante, el soldado de las Fuerzas de Autodefensa Kazuma Chigasaki y del joven Iwadate, quien siente algo por Kôta, parten en su búsqueda. Sin embargo, Chigasaki, a mitad de camino, tras enterarse de que Iwadate asaltó a Haruomi, comienza a besar y a magrear el cuerpo de su pareja de una forma más violenta de lo normal. A pesar de las disculpas de Chigasaki, Mishiba queda preocupado a causa de estos actos... ¡y en medio de este ambiente tenso, son atacados por un grupo de zombis entre los que se encuentra Kôta!