Sachi es una estudiante de instituto. Actualmente cursa segundo de bachillerato y lleva tiempo saliendo con Takara, un amigo de la infancia que tiene la misma edad que ella.
Cierto día de invierno, Sachi siente que algo no va del todo bien con su cuerpo. Es entonces cuando recuerda aquella ocasión en la que a Takara y a ella se les rompió el preservativo al mantener relaciones sexuales.
Preocupada, viaja sola hasta una zona donde no la conoce nadie y compra un test de embarazo. A pesar de lo insegura que se siente, Sachi termina haciéndose la prueba en el baño de un restaurante familiar y, tras tomar una gran bocanada de aire, se atreve a mirar el resultado. El test sale positivo, lo que confirma sus sospechas: está embarazada.