El último triunfo de Thrawn aún está reciente. Ha conducido a los chiss a la victoria y ha glorificado la familia Mitth, pero la verdadera amenaza contra la Ascendencia aún no ha sido eliminada. Su enemigo no lanza amenazas ni ultimatos, no cuenta con naves en los confines del Caos. Sus armas se ocultan tras sonrisas y generosidad: regalos gratuitos, servicios prestados altruistamente...
Por toda la Ascendencia, sucesos aparentemente insignificante pueden presagiar el fin de los chiss. Cuando Thrawn y la Flota de Defensa Expansionaria unen fuerzas para desenmascarar la conspiración descubren una verdad estremecedora: en lugar de invadir sus capitales o saquear sus recursos, su enemigo golpea los fundamentos de la Ascendencia, intentando incentivar las diferencias entre las Nueve Familias Regentes y, debajo de estas, las Cuarenta Grandes Casas. Cuando las rivalidades y sospechas siembran la discordia entre aliados, cada guerrero debe decidir qué es lo más importante para él: la seguridad de su familia o la supervivencia de la Ascendencia.
Thrawn y sus aliados corren a salvar a la Ascendencia Chiss frente a un enemigo desconocido.