«La luz es la mano izquierda de la oscuridad, y la oscuridad es la mano derecha de la luz. Los dos son una, vida y muerte, juuntas como amantes en kémmer, como manos unidas, como el término y el camino.».
«Escribiré mi informe como si contara una historia, pues me enseñaron siendo nió que la verdad nace de la imaginación». Así comienza su relato Genly Ai, enviado al planeta Gueden -también llamado Invierno por su gélido clima- con el propósito de contactar con sus habitantes y proponerles unirse a la liga de planetas conocida como el Ecumen.
Los guedenianos tienen una particularidad que los hace únicos: son hermafroditas, y adoptan uno u otro sexo exclusivamente en la época de celo, denominada kémmer. En Invierno, Ai contacta con Estraven, un alto cargo que le mostrará cuán diferente puede llegar a ser una sociedad donde no existe la diferenciación sexual.