¡A Dora no le gustan, para nada, las fiestas! Son demasiado ruidosas y hay demasiada gente. ¡Quizás no tenga que ir si un gorila le roba el vestido para la fiesta o si una rana GIGANTE se come su zapato! Pero... ¿y si Dora pudiera encontrar un sitio tranquilo en la fiesta, y si ahí se encontrara a alguien más a quien no le gustan las fiestas ruidosas? Entonces podrían pasar un buen rato a su manera. Y eso podría estar absolutamente, COMPLETAMENTE, totalmente y perfectamente ¡BIEN!
Hay muchos tipos de niños distintos, y no a todos les gustan las mismas cosas. Acompaña a nuestra protagonista a descubrir que también hay muchos tipos de fiestas distintas, y que puede, que exista alguna que le guste.