Fracturado, exhausto y perdiendo la concentración, Eddie corre el riesgo de adoptar una apariencia familiar, ¡junto con algunos viejos (y letales) hábitos! Cara a cara contra las manifestaciones de sus propios enfados, odio e ira, ¿tendrá Eddie la fuerza para enfrentarse a sus mayores enemigos hasta el momento y salir victorioso?