Una ligera bruma se alza sobre la costa normanda, justo al alba, un fenómeno habitual que sin duda los soldados alemanes que vigilan la costa conocen bien. Pero aquel no es un día cualquiera. La mayoría han sido informados de que, desde primera hora de la madrugada, se combate fieramente en el interior de la península de Cotentin, y en la orilla este del río Orne. Tal y como contamos en Desperta Ferro Contemporánea n.º 33, miles de paracaidistas aliados han saltado sobre Francia. En Colleville, Saint Laurent, Vierville o La Madeleine, los soldados de Hitler, atrincherados en sus búnkeres, saben sin duda que ha llegado el día. Tras el bombardeo aéreo llegan los proyectiles de la Marina y, tras estos, entre el humo de los incendios, se hacen visibles las lanchas de asalto. También para ellos, ha llegado el Día-D, el día más largo. Este número de Desperta Ferro Contemporánea quiere evocar, precisamente, los combates durante el desembarco de Normandía en las playas Utah y Omaha. Acompañaremos a los soldados norteamericanos desde los ejercicios de entrenamiento en Inglaterra, algunos letales, hasta las lanchas de desembarco, y de ahí a las playas, donde pasarán a formar parte de la historia.