Sophie solo quiere una cosa para esta Navidad: pasar tiempo con Griffin, su novio. Así que, cuando sus padres empiezan a planear un viaje para visitar a la hermana de Sophie, ruega para que la dejen quedarse en casa con sus abuelos. Pero, contra todo pronóstico, ella y Griffin rompen y Sophie se queda hecha polvo.
La abuela de Sophie odia verla así, por lo que va a hacer todo lo posible para recomponer su corazón roto. Dedice que, durante los siguientes diez días, diferentes miembros de la familia de Sophie le preparán citas a ciegas. Un plan nada incómodo para ninguno de los implicados ¿verdad? Y todo se complicará más cuando Griffin vuelva Sophie está más confundida que nunca porque, quizá, quién sabe, puede que esté empezando a sentir algo por otra persona.