DeConnick y Ríos parten de un western de aspecto clásico para, a continuación, distorsionarlo y convertirlo en algo totalmente nuevo, en donde lo inesperado se convierte en habitual. Bella Muerte es una serie que combina el realismo mágico de Sandman con la brutalidad del western crepuscular de Predicador. Emma Ríos asegura que necesitaba clavar el tono visceral y poético del guión, y confiesa que, durante meses, se dedicó a ver un western (o una película de samuráis) cada día y que Sergio Leone y Masaki Kobayashi se convirtieron en sus musas, especialmente debido a sus peculiares estéticas y tempos, cercanos a lo onírico.