Cade Skywalker sigue intentando evadirse de las responsabilidades que conlleva su legado familiar. En pos de una paga sencilla, su tripulación y él se dan de bruces con las secuelas del mayor fallo cometido por su padre.
El planeta Wayland, que antaño fue un lugar fértil, se ha convertido en una pesadilla viviente gracias al primer intento de Kol Skywalker de ponerle puertas a la biotecnología terraformadora de los Yuuzhan Vongs. Pero eso no es lo único que se esconde aquí; Cade también dará con los secretos ulcerados de dicha raza y de los siths... y eso lo llevará a un punto de inflexión. Mientras, en otro lugar de la galaxia, cabe la posibilidad de que el inminente enfrentamiento entre los Jedis, los Siths y los Caballeros Imperiales de Roan Fel tenga como consecuencia la paz.