Han tenido que pasar casi treinta años para poder disfrutar de la edición completa en español de las aventuras de Bruce J. Hawker, pero la espera merece la pena. De la mano del guionista e ilustrador belga William Vance, en colaboración con A. P. Duchâteau a partir del cuarto álbum, nos llega una saga que combina historia naval e intrigas.
Corre el año 1800 en Londres, punto de partida de las hazañas del apuesto teniente Bruce J. Hawker, un joven oficial de la Royal Navy que recibe del Almirantazgo una peculiar y casi suicida misión: escoltar un convoy con un arma secreta. En el transcurso de aquella tendrá que afrontar los más diversos peligros y hacerse fuerte frente a las situaciones más adversas.
El olor a salitre, el atronador ruido de las baterías de cañones lanzando salvas, el quejido de los buques, los constantes romances del galante Bruce, el descenso a los infiernos de la perfidia y un siempre presente alto sentido del honor soplan con fuerza en cada uno de los capítulos.
El entretenimiento para los paladares más exigentes está servido.