Este álbum será la confirmación del fenomenal destino de Astérix. Un cómic que, como una auténtica obra de sociología, logra mostrar la esencia del universo franco-galo con grandes dosis de humor, talento y ternura.
En la división original del álbum en escenas, realizada por René Goscinny, el autor incluía el siguiente comentario: «Ambos entran en una tienda con un rótulo en el que se lee: 'charcutería - alimentación'. En la puerta hay un perrito».
Curiosamente, esta última frase, en principio anodina, aparece subrayada. Y quizás, por eso, Albert Uderzo decidió dar en sus dibujos un papel más destacado a este perrito que, algún tiempo más tarde, y después de un concurso lanzado por la revista francesa Pilote, será bautizado con el nombre de Ideafix (Idéfix, originalmente).
Hoy en día, este perrito aún sin nombre en La Vuelta a la Galia se llama, según las diferentes traducciones, Dogmatix, Idefiks, Ideafix, Kuzifix, Ideiafix ¡e incluso Snupix!