Jim Starlin: obra, vida y hechos del heraldo de la Muerte
El Staff
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Jim Starlin es uno de los autores de cómics más relevantes de la industria, aunque su nombre muchas veces se pase por alto. En este artículo te hablamos del padre de Thanos, una de las mentes más lúcidas y peculiares del cómic.
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El mundo del cómic está plagado de grandes nombres. Muchos aficionados y recién llegados se suelen llenar la boca con la mención de los grandes: Stan Lee, Jack Kirby, Neil Gaiman, Alan Moore, Len Wein, Frank Miller, Neil Adams y, cómo no, Will Eisner.
Todos ellos, ojo, son figuras sin las que el mundo del cómic no sería lo mismo. Pero hay un nombre al que también debemos referirnos y no siempre nos acordamos de él. Nos referimos a Jim Starlin (Detroit, Michigan, 1949), conocido en ciertos círculos como Doctor Muerte o, simplemente, Mister Muerte.
Entre los grandes éxitos de Starlin se cuentan hitos como la creación de Thanos, la redefinición del Marvel Cósmico, La Muerte del Capitán Marvel, la muerte de Robin, la muerte de Warlock, el genocidio del planeta Xanshi... y un largo catálogo de defunciones que le hicieron convertirse en sinónimo de muerte y devastación en todo cómic que tocaba. -
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En realidad, Jim Starlin no es tan fiero ni tan inclemente como su leyenda negra lo pinta. Lo que sí hemos de admitir es que el dibujante y guionista fue un autor revolucionario, introduciendo la normalización del concepto de la muerte y su significado metafísico en el cómic de superhéroes.
Esto, y su influencia narrativa, hizo que el concepto de contar historias, sobre todo de corte cósmico y mitológico, se bañaran de un denso tamiz de misticismo.
Pero vayamos por partes. -
Soy Jim Starlin, destructor de mundos
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La carrera de Jim Starlin, hasta donde sabemos, comenzó en plena guerra de Vietnam. El futuro dibujante y escritor comenzó su carrera artística como fotógrafo en el conflicto del país del sudeste asiático.
En este periodo, Starlin trabajaba para la Armada, realizando fotografías aéreas. Aunque no sería su paso por la carlinga de un avión lo que le valdría entrar en la industria del cómic; de hecho, sus ratos libres serían la clave para su debut en el mundillo.
Y es que, entre turno y turno, Starlin aprovechaba para realizar páginas y abocetar personajes. Este trabajo, posteriormente, era remitido a las grandes editoriales, que buscaban talento. No se le debió de dar mal, por cierto, porque hacia 1970-72 logró entregar un par de cómics a DC antes de ser fichado por la Marvel de Roy Thomas. -
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Bajo la dirección de Thomas, Starlin se inició en Marvel acabando las páginas de Spiderman. Su trabajo llamó la atención en 1973, lo que le hizo ganar el Premio a Mejor Nuevo Talento del Año junto a Walt Simonson.
Hay que decir que 1973 sería un año dulce para Starlin, pues ese mismo año sería cuando dibujaría el número “The Invincible Iron Man #55”, el debut de su gran creación: Thanos, el Titán Loco.
De este modo, Starlin comenzaría co-escribiendo y dibujando historias del Capitán Marvel, que puedes leer en el tomo “La Saga de Thanos”. Así, narraría el auge y caída de este gran antagonista de Marvel, un nihilista obsesionado con ganar el afecto de la entidad cósmica conocida como la Muerte.
En este periodo, Starlin demostraría un vivo interés por el ocultismo, el misticismo y la metafísica. Algo que, por cierto, era normal en aquella época.
Como hijo de su tiempo, Starlin vertió estas inquietudes en su obra, realizando una serie de aventuras en clave de ensayos sobre la naturaleza del alma y de la divinidad. Esto, sobre todo, se vería en los cómics que dedicaría a Adam Warlock, uno de los seres más controvertidos y atormentados del Universo Marvel.
Tras haber trabajado en diversas colecciones para Marvel y encargos puntuales para DC –de los que nacerían personajes como Mongul, co-creado con Len Wein–, Starlin se convirtió en un peso de la industria.
Hacia 1978 montó su propio estudio, en el que colaboró con autores tales como Howard Chaykin y Walt Simonson. Pero los años 80 supusieron un cambio de rumbo. -
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Con la publicación de Epic Comics, el sello adulto de Marvel de aquellos años, Starlin creó a su otro personaje fetiche: el guerrero cósmico Vanth Dreadstar, que acabaría desarrollando su propia novela gráfica y serie limitada. Sin embargo, su verdadero hito fue la publicación de “La Muerte del Capitán Marvel”.
En este cómic, el autor presentó el fenómeno del tránsito al Más Allá desde una nueva óptica apenas explorada. Y lo hizo “asesinando” al personaje más bondadoso y heroico del Universo Marvel, el Kree Marv-Vell.
Esta obra, en muchos sentidos, sigue siendo un referente narrativo del que muchos autores han bebido a la hora de enfocar una cuestión tan difícil de plantear como es la muerte y el punto final de un personaje.
En los siguientes años, colaboró con diversos escritores en proyectos benéficos y desarrolló sus propios proyectos. Pero un cambio de rumbo, siendo fichado por DC para Batman, hizo que el Caballero Oscuro se convirtiera en “víctima” de Starlin, con un giro inesperado a sus historias. -
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La trama de “Batman: Las 10 noches de la Bestia” fue un cruento baño de sangre, que se saldó con Batman (aparentemente) cruzando su línea moral y ejecutando al villano que daba nombre al relato de una forma bastante cruenta.
Aunque tiempo después este final se cambió, Batman tuvo un punto muy negro en su hoja de servicios durante los años venideros. Y eso sin mencionar los hechos de “Batman: La secta”, que tampoco ayudaron a la imagen del héroe en aquel momento.
Pero la tragedia que llamaría a la puerta del Cruzado Enmascarado sería otra. En 1988, Starlin sería la mente detrás del cómic “Una muerte en la familia”, que narraría la muerte de Jason Todd, el segundo Robin, a manos del Joker. -
Auge y... ¿declive?
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Los años 90 supusieron el regreso de Starlin a Marvel –al menos entre 1991 y 1994, desarrollando una compleja trama que comenzó en las páginas de Estela Plateada y acabó evolucionando el gran crossover cósmico de los 90: El Guantelete del Infinito y sus secuelas.
Todas estas obras, que están disponibles en la Colección Jim Starlin, se tradujeron en la resurrección de Thanos y de Adam Warlock, que durante 20 años habían estado muertos. -
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Tanto Thanos como Warlock evolucionaron en este cómic, asumiendo el papel de anti-héroes y peones en la gran partida cósmica.
Estas obras, algunas de ellas más brillantes que otras, fueron la excusa de Starlin para volver a sus discursos místicos y volver a hablar de las cuestiones mitológicas y teológicas que tanto le gustaban.
Este proceso creativo se dilató durante una década, concluyendo entre 2003 y 2004 con la publicación de “Marvel: El fin” y los primeros números de la mini-serie de Thanos, que sirvieron de antesala al evento de “Aniquilación”.
Los últimos 10 años de la carrera de Starlin han fluctuado entre colaboraciones y trabajos puntuales, como su labor como guionista de “Stormwatch” en el Nuevo Universo DC.
Sin embargo, la cabra tira al monte y su principal foco de atención ha estado en las diversas novelas gráficas de Thanos, en las que, de nuevo, Starlin ha explorado temas filosóficos y metafísicos, muy en la línea de las historias que a él le interesa contar. -
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En Akira Cómics nos encantan los cómics, y no solo los de Jim Starlin. No obstante, si quieres saber más sobre este prolífico, controvertido e interesante autor, te invitamos a que vengas a vernos a nuestra tienda y preguntes a nuestro equipo por las obras que te mencionamos en este artículo y otras tantas que nos hayamos podido olvidar.
Imágenes | Akira Cómics.