Historia del cine de superhéroes II: el triunfo de los héroes
Jesus Marugán
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Segunda parte de la historia del cine de superhéroes. Hoy te contamos cómo este tipo de cine fue abriéndose paso hasta triunfar de manera incontestable.
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Como vimos en el anterior artículo dedicado al cine de superhéroes, las películas de Warner Bros. fueron las que llevaron la tónica dominante entre la década de los 70 y la de los 90 del siglo pasado. Sin embargo, los últimos años del siglo XX han supuesto un cambio de dirección.
El empresario Avi Arad se dio cuenta de la ventaja que siempre tendría Marvel sobre DC Comics: los personajes de la primera eran mucho más variados, complejos y populares que los de DC. Traducido al mundo del cine, eso significaba que los personajes Marvel eran muchos más exportables a la industria del cine que los de DC.
Y es que, desde 1998, con el tremendo éxito de “Blade” de Stephen Norrington y Wesley Snipes, se puso de manifiesto que si un personaje olvidado y de segunda fila como Blade era capaz de cosechar un éxito tan brutal en los cines de todo el mundo... ¿Qué no lograrían personajes con mucho más tirón, como Spiderman, los X-Men o Los 4 Fantásticos? -
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Dicho y hecho. La simbiosis profesional entre Marvel Comics (la editorial) y Marvel Studios (las películas) logró, desde el año 2000 y hasta 2007, que los mayores y principales éxitos de taquilla del mundo de los superhéroes fueran franquicias Marvel, como X-Men, Lobezno o Spiderman.
En cambio, la distinguida competencia de Marvel, DC Comics, a través de su propietaria y productora Time Warner, se vio obligada a entrar en esa carrera de franquicias de nuevo, con estrenos tan dispares como “Batman Begins” en 2005, todo un éxito de crítica y de público, “Superman Returns” en 2006 o “Catwoman” en 2004, que es, sencillamente, un bodrio perfectamente olvidable. -
La edad contemporánea, ¿una Edad de Oro?
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El éxito de “Batman Begins” llevó a Warner hacia una nueva dirección, consagrando un estilo realista en la presentación de las historias. El culmen de este estilo lo encontramos en la segunda parte de la trilogía de Batman del director Christopher Nolan. Esto es, “El Caballero Oscuro” (2008).
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Esta película consagró la visión tenebrosa de los superhéroes, y a la vez presentó películas de género híbrido. En este caso, mezclando neo-noir con una historia de superhéroes. Esta fórmula marcó la dirección a tomar por parte de Warner y sus películas de DC Comics, pero también las de la competencia.
Así, desde mediados de la década de los 2000, Disney y la recién creada compañía de Marvel Studios pugnaron por llevar al cine al resto de personajes de la Casa de las Ideas. Pero con Spiderman en manos de Sony y los X-Men y los 4 F en las de Fox, a los estudios les ha quedado una sola salida: apostar por Los Vengadores.
De esta manera, en su momento se encargó a Edgar Wright la redacción de un guion para hacer una película del Hombre Hormiga, “Ant-man”. Pero esta película quedó en barbecho cuando Kevin Feige, CEO de la compañía, y otros ejecutivos prefirieron apostar por un personaje con algo más de carisma. De este modo, llegó “Iron Man” en 2008.
Pronto le siguieron películas como “Thor”, “El Increíble Hulk”, una “Iron Man 2” y “El Capitán América: El primer vengador”, que serían la antesala del ambicioso crossover de todas estas películas en 2012: “Los Vengadores”. -
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Estas películas adoptaron la premisa de ser historias de género híbrido, tal y como sucediera con “El Caballero Oscuro”. Así, “Thor” mezcla las aventuras y la épica con las historias de superhéroes; “Capitán América” bebe del cine bélico; “Iron Man”, de los thrillers de acción y de espías…
Todo ello favoreció una visión distinta por parte de público y crítica en relación a este tipo de películas. Sobre todo, porque esto creó un universo cinematográfico común para los superhéroes, en donde todas las películas estaban conectadas entre sí. Así es cómo se cimentó el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM, a partir de ahora).
Sin embargo, en 2012 se produjo también una divergencia total. Mientras Marvel consolidaba un estilo discursivo basado en el optimismo y en una estética visual colorida y vistosa, las películas de DC se enrocaban en el estilo de Christopher Nolan.
El estreno en 2013 de “El Hombre de Acero” de Zack Snyder reveló un Superman que se alejaba del de los cómics para mostrar una versión torturada del héroe, más cercana a la visión de Nolan de Batman que a la del Hombre del Mañana que encarnara Christopher Reeve en los años 70 y 80.
Fox, durante estos años, logró dar algunos palos de ciego, con algunos aciertos muy serios como “Logan” o “Deadpool”, en tanto las películas de X-Men y la de los 4 Fantásticos de Josh Trank consiguieron resultados más bien tibios.
Entre medias, Sony Pictures fracasó con su visión de Spidey. Sus dos películas de “The Amazing Spiderman” no lograron alcanzar los resultados esperados y la franquicia se desechó.
La oposición de planteamientos se hizo total cuando Marvel Studios logró consolidar su hegemonía, marcando la tónica de producir entre dos y tres películas de superhéroes al año. Gracias a ello, personajes como los Guardianes de la Galaxia se convirtieron en héroes más conocidos por todo el público, a medida que su humor y su planteamiento se comenzaron a imponer.
Mientras, Warner comenzó sus planes de crear un universo cinematográfico cohesionado. Su apresurado plan les llevó a retrasar la secuela de “El Hombre de Acero”, en la que se introduce a los nuevos Batman y Wonder Woman. Esta “Batman v Superman: El Amanecer de la Justicia” fue una película que dividió a fans y espectadores acerca del modo de entender a los superhéroes.
La siguiente película, “Escuadrón Suicida”, tampoco creó mucho consenso. No así “Wonder Woman”, que fue el primer éxito flagrante de Warner en el cine de superhéroes durante años. A pesar de ello, la llegada de su propio crossover de películas “Liga de la Justicia” fue un jarro de agua fría, al no cumplir con las expectativas. -
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Aparentemente imbatible, Marvel logró cerrar en 2016 un acuerdo con Sony en virtud del cual Spiderman se uniría a los personajes del UCM.
Este acuerdo hizo debutar al personaje en “Capitán América: Civil War” y permitió que se integrara dentro de la continuidad. De esta manera, y con una pléyade de personajes y franquicias en su poder, Marvel llevó a cabo varias películas que introducían nuevos héroes, algo jamás visto en la gran pantalla. Los más sonados: “Doctor Extraño” (“Doctor Strange”) y “Pantera Negra” (“Black Panther”).
El ambicioso plan de Marvel Studios tomó finalmente forma en 2018 con “Vengadores: Infinity War”, una película que adapta los cómics “Infinito” y “El Guantelete del Infinito”. Esta película logró hacer un crossover con todas las franquicias del UCM. Y con ello se consolidó una fórmula de hacer cine de superhéroes.
Sin embargo, el bombazo que ocurre a mediados de ese año –la compra de Fox por parte de Disney– anuncia que Los 4 Fantásticos, Deadpool y X-Men vuelven a Marvel. De este modo, estos personajes se unirán en un futuro no muy lejano al UCM.
En el momento en que se redactan las últimas líneas de este artículo, Sony prepara el estreno de “Venom”, la película del simbionte Veneno de Spiderman, y Warner se encarrila para estrenar a finales de año “Aquaman”, protagonizada por Jason Momoa. -
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Con esto se demuestra que el género de películas de superhéroes está lejos de acabarse y que sigue más vivo que nunca, viviendo una suerte de nueva Edad de Oro. ¿Pero qué le deparará el futuro?
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Si te perdiste la primera parte, aquí la tienes:
Imágenes | Akira Cómics.